Los pueblos más baratos para comprar casa en España por CCAA en 2026

Descubre cuáles son los pueblos más baratos para comprar casa en cada comunidad autónoma en 2026, por qué tienen precios tan bajos y qué debes tener en cuenta antes de invertir o mudarte. Guía práctica para compradores e inversores. Los precios de la vivienda siguen tensionados en muchas ciudades, pero en numerosos pueblos de España aún es posible comprar una casa por un coste muy inferior a la media. Analizamos por qué ocurre, qué perfiles se están interesando por estos municipios y qué debes valorar antes de dar el paso.

En los últimos años, el mercado inmobiliario español ha vivido una fuerte polarización. Mientras que en grandes capitales y zonas turísticas el precio por metro cuadrado no deja de subir, numerosos municipios pequeños han quedado al margen de esta escalada, ofreciendo viviendas a precios muy competitivos.

Informes recientes sobre precios de vivienda elaborados por portales inmobiliarios y por organismos oficiales como el
Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana apuntan a una realidad clara:
en casi todas las comunidades autónomas existen pueblos donde comprar casa sigue siendo relativamente asequible frente a la media regional.

Desde Adaix, con presencia en todo el territorio nacional, vemos a diario cómo estos mercados “alternativos” despiertan el interés de compradores que buscan más espacio, tranquilidad y precios razonables, sin renunciar a una buena calidad de vida.

1. Contexto: por qué los pueblos siguen siendo más baratos

La subida de tipos, la menor capacidad de compra de muchas familias y la escasez de oferta en zonas tensionadas han llevado a muchos compradores a mirar más allá de las grandes ciudades. Sin embargo, en buena parte de la España rural los precios se mantienen moderados e, incluso, muy bajos en comparación con el promedio nacional.

Los estudios de precios de vivienda muestran que en determinados municipios el valor por metro cuadrado puede situarse muy por debajo de los 1.000 €/m², e incluso por debajo de los 600 €/m² en algunos casos. Esto contrasta con capitales donde se supera con facilidad los 2.000 €/m² o más en zonas céntricas y de alta demanda.

Esta diferencia de precio está impulsando un cambio de mentalidad en muchos compradores: familias que buscan una vivienda más amplia, teletrabajadores que no necesitan vivir en el centro de una gran ciudad, e inversores que ven en estos municipios una opción para diversificar su cartera inmobiliaria.

2. Factores que explican los bajos precios en muchos municipios

Despoblación y envejecimiento demográfico

En buena parte del interior peninsular, la pérdida continuada de población ha reducido la demanda de vivienda. Menos habitantes significa menos competencia por los inmuebles, lo que se traduce en precios de venta más contenidos y en un stock que tarda más en absorberse.

Limitada actividad económica local

Aunque la calidad de vida pueda ser alta, muchos pueblos presentan un tejido empresarial reducido. La falta de empleo estable hace que el interés residencial sea menor y el precio de la vivienda no experimente grandes subidas.

Ausencia de presión turística

Frente a municipios costeros o grandes ciudades con fuerte atractivo turístico, numerosos pueblos del interior o de zonas menos masificadas no han sufrido una presión extra de demanda para alquiler vacacional, lo que ha ayudado a mantener los precios bajo control.

Oferta de vivienda antigua o a reformar

En muchos pueblos, buena parte de la oferta disponible son viviendas construidas hace décadas, que pueden requerir reformas. Esto se refleja en valoraciones de salida más bajas, aunque el comprador deba contemplar posteriormente una inversión en rehabilitación.

3. Pueblos más económicos por comunidades autónomas: panorama general

Los informes de precios por municipios muestran que prácticamente todas las comunidades autónomas tienen localidades especialmente asequibles. No siempre son las mismas que lideran los rankings absolutos a nivel nacional, pero sí destacan dentro de su propia región por su diferencia respecto a la media.

En comunidades de interior como Castilla-La Mancha, Castilla y León, Aragón o Extremadura es habitual encontrar pueblos donde el metro cuadrado se sitúa muy por debajo de la media nacional. También en algunas zonas del interior de Andalucía o Galicia aparecen municipios con una brecha importante respecto a las grandes ciudades de su entorno.

Por otro lado, incluso en comunidades con mercados muy tensionados, como Comunidad Valenciana, Cataluña o Baleares, siguen existiendo pueblos del interior cuyos precios resultan más razonables para quienes están dispuestos a alejarse de la costa o de las áreas metropolitanas.

Lo importante para el comprador es entender que “pueblo barato” no significa lo mismo en todas las comunidades: un precio muy bajo en una autonomía puede equivaler a un valor medio en otra. Por eso, conviene comparar siempre con las referencias oficiales y con el apoyo de profesionales que conozcan el mercado local.

4. Quién está comprando en estos pueblos y por qué

Familias que buscan más espacio y menos estrés

Muchas familias con hijos están valorando cambiar un piso pequeño en ciudad por una casa más grande con patio o terreno en un municipio pequeño. El coste total de la operación puede ser similar, pero la calidad de vida percibida es mayor.

Teletrabajadores y profesionales digitales

El teletrabajo consolidado permite a muchos profesionales vivir lejos de los grandes núcleos urbanos. Para ellos, disponer de una vivienda amplia, luminosa y con costes fijos más bajos es una prioridad, siempre que exista una conexión a internet adecuada y servicios básicos.

Inversores de largo plazo

Determinados perfiles inversores están apostando por comprar vivienda en pueblos baratos como estrategia de diversificación. En algunos municipios con proyectos de desarrollo local, turismo rural o reactivación económica, se espera una posible revalorización a medio y largo plazo.

5. Claves antes de comprar vivienda en un pueblo barato

• Analiza la tendencia del municipio: evolución de población, servicios, comunicaciones y empleo.
• Comprueba el estado real de la vivienda: muchas casas económicas necesitan reforma estructural o energética.
• Revisa el planeamiento urbanístico: información disponible en ayuntamientos y comunidades autónomas.
• Valora los costes totales: no solo el precio de compra, también impuestos, reforma, mantenimiento y desplazamientos.
• Ten en cuenta tu día a día: tiempo hasta tu lugar de trabajo (si no teletrabajas), colegio, centro de salud o comercios.

Contar con el acompañamiento de una agencia con experiencia en diferentes mercados, como Adaix, puede ayudarte a filtrar las mejores oportunidades y a evitar decisiones impulsivas basadas únicamente en el precio.

6. Conclusión: oportunidad sí, pero con planificación

Los pueblos más baratos para comprar casa en España ofrecen una oportunidad real para acceder a vivienda en propiedad con un presupuesto ajustado. En 2025, la combinación de precios contenidos, mejora de las comunicaciones y consolidación del teletrabajo ha puesto de nuevo el foco en estos municipios.

Sin embargo, no se trata solo de encontrar el precio más bajo, sino de elegir un entorno que encaje con tu proyecto de vida o con tu estrategia de inversión. Analizar bien el municipio, la vivienda y tus necesidades a medio plazo es tan importante como negociar una buena operación.

Si estás valorando comprar en un pueblo barato y quieres asesoramiento profesional, en la red de oficinas de Adaix podemos ayudarte a estudiar opciones, comparar zonas y tomar una decisión informada.

7. Preguntas frecuentes